Ayer, viendo la exposición de Marc Chagall en el Museo Thyssen, llena de pájaros, violines, flores, y amor (mucho amor); me vinieron a la memoria estos versos de Juan Gelman, que hoy he buscado para dejarlos aquí.
"El violinista azul" de Marc Chagall
Epitafio
Un pájaro vivía en mí.
Una flor viajaba en mi sangre.
Mi corazón era un violín.
Quise o no quise. Pero a veces
me quisieron. También a mí
me alegraban: la primavera,
las manos juntas, lo feliz.
¡Digo que el hombre debe serlo!
Aquí yace un pájaro.
Una flor.
Un violín.
Juan Gelman
Adoro a Chagall. Y esos versos le cuadran a las mil maravillas.
ResponderEliminarBesos.
Chagall!!!!!
ResponderEliminarNadie como él pintando sueños.
Tuvimos la suerte hace ya algunos años, de contemplar la obra de Chagall en el Museo Provincial de Tossa de Mar... no recuerdo si este que nos muestras se encontraba entre tantos otros, pero me encantó este pintor, que como ya ha dicho La Isla Misteriosa, pintaba sueños como sólo él...
ResponderEliminarSaludos cordiales.
Queti, pensaba ir a verla, pero ahora me ha entrado todavía más ganas de ir verla.
ResponderEliminarEl poema y el cuadro forman una preciosa combinación. Para una romántica como yo, la que amo mucho y, alguna vez la quisieron, eso quiero creer, me alegra el alma. Un abrazo
Cool!
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