EN UNA ESTACIÓN DE METRO
Desventurados los que divisaron
a una muchacha en el Metro
y se enamoraron de golpe
y la siguieron enloquecidos
y la perdieron para siempre en la multitud
Porque ellos serán condenados
a vagar sin rumbo por las estaciones
y a llorar con las canciones de amor
que los músicos ambulantes entonan en los túneles
y quizás el amor no es más que eso:
una mujer o un hombre que desciende de un carro
en cualquier estación del Metro
y resplandece unos segundos
y se pierde en la noche sin nombre
Óscar Hahn en Versos robados, 1995
No conocía a Óscar Hahn y me ha gustado su sencillez y, en ella, su lirismo sin ampulosidad
ResponderEliminarGracias Q.por dármelo a conocer
Un fuete abrazo
Yo tampoco conocía a Oscar Hahn, gracias por traerlo. Me gustan sus versos y me traen recuerdos de mi juventud, cuando cogía el metro para ir a trabajar y siempre espera ver al chico especial que te gustaba y sabias se subía en la próxima estación y, si un día no subía estabas triste y pensabas que habría pasado. Un abrazo
ResponderEliminarMe ha gustado muchísimo esta entrada, ha encendido mi imaginación. No conocía al autor,
ResponderEliminarUn gustazo.