Mientras España ardía y un poeta miraba deshacerse el hielo en canto, fluir las frases brillantes de la tierra, la luz, la salvación, él llegaba a la cima de lo eterno.
Y nadie pudo ir más allá. Algunos lo intentaron. Amplias crónicas relatan los naufragios de la época. Incluso el mismo rey quiso ser joven. Y así dispuso que brillara el sol en todo el territorio. Nadie pudo rozar siquiera la elevada música por él pintada. Mientras todo ardía, él levantó la hoguera inextinguible. Y vio hacia dentro, descubrió su ser. Música detenida, punto inmóvil.
El arte estará siempre pensándose a sí mismo en
Las Meninas.
José Luis Rey en "La luz y la palabra"
Las Meninas!!!!!!, sería torpe por mi parte intentar hablar de esta obra sublime. Las Meninas es mucho más que una obra de arte. Podría hablarte de ese cuadro durante horas y horas: del cuenco de barro que le dan a la infanta, de la constelación de lira, del juego de los espejos, del enano, de la cruz pintada en el pecho de Velázquez... ... ...y sobre todo de lo que considero más mágico de esta obra: El Aire. Más de la mitad del cuadro es aire y sólo aire. Las figuras sólo ocupan de la mitad hacia abajo y todo lo demás es un derroche de vacío matemático y calculado. Yo también salvaría el aire del fuego. Me encantó esta entrada.
ResponderEliminarCuando dije: "constelación de lira" quise decir "corona boreal"
EliminarLa soledad de La Misteriosa da para ésto y para más.
!Vaya pluma¡ Esto es escribir sobre un cuadro y no lo que hacemos algunos. Me ha dejado tan impresionado que he estado preguntando por este señor en Internet y claro.......
ResponderEliminarContigo siempre voy descubriendo algo de ese mundo de la poesía que tu conoces tan bien.
Un abrazo.
Ah las meninas...por muchas veces que las contemple no me canso. Este cuadro y alguno de Goya son visitas obligadas una y mil veces
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